Agosto…el mes que fue bautizado con ese nombre en homenaje al emperador romano Augusto Octavio. Un mes donde «Nunca pasa nada«…o sí. Un mes de agosto, del año 79, las cenizas del Vesubio sepultaron las ciudades de Pompeya y Herculano, un 20 de agosto de 1940 León Trotski fue asesinado en México. También fue en agosto (1945) que Estados Unidos lanzó sus primeras bombas atómicas en Hiroshima y Nagasaki (Japón). En la noche del 20 al 21 de agosto de 1968, los tanques del Ejército Rojo penetraron en Checoslovaquia para aplastar la “primavera de Praga”, fue en agosto que los Beatles cantaron juntos por última vez (1966), murió Elvis Presley (1977) y Lady Di se estrelló contra una columna en el túnel de l’Alma en París (1997). Agosto tendría una reputación infame si no fuera por que todos desconectamos durante este mes , no queremos saber más del mundo que nos rodea o mejor dicho… queremos disfrutar de él en su parte más amable, bañándonos con la sensualidad de los rayos solares, acariciando nuestra piel suavemente con la arena de la playa, mojando nuestros cuerpos con las refrescantes aguas y brisas. Dejar la mente en blanco, para resetear nuestro disco duro mental, cerrar los ojos mientras apretamos levemente los labios pensando en aquel amor de verano que nos hizo vibrar… en todo este proceso de limpieza de pensamientos, de eliminación de estrés, de higiene mental y roces de algodón, conviene tras la depuración de datos y espíritu, darle tregua a nuestra mente, está nunca para, pues siempre inquieta busca donde mantenerse ocupada. Demosle algo con lo que soñar , con lo que interesarse… algo con lo que divertirse y llenar este espacio donde «Nunca pasa nada«, la mejor opción es la lectura, pues es bien sabido que la lectura es cultura y en Alicante tenemos escritores e ilustradores locales para variados momentos y ocasiones. Mis recomendaciones particulares parten desde la novela «No guardes en la cabeza lo que te cabe en el bolsillo» de Jonn López Davila, un interesante recorrido por diversas partes del país desde la visión de dos amigos, que va atrapando al lector pudiendo este identificarse con las conversaciones y vivencias de los mismos en algún momento de su vida, novela entretenida , muy nuestra que muestra el carácter de los habitantes de una tierra, lectura de la que nunca se tiene suficiente, de la que siempre se quiere más… y hablando de Novelas «Imagina mi Alma» de Pepe Calvo, toda una experiencia vital que nos brinda la oportunidad de ser testigos y parte del Universo de Pepe, mágico, real y propio. El Autor nos regala pinceladas de un Alicante que no volveremos a ver y nos tiende la mano a ser cómplices de sus susurros. Leer su color y sentir su blanco y negro dentro de nosotros, un Pepe inseparable.. un amigo de pasiones …un cómplice con el que todos soñamos y solo algunos encuentran.»Déjame penetrar por ese oído» de Manuel A. Velandia Mora, nos sumerge en la poesía sin límites , como él mismo, una poesía ingeniosa, entretenida, que sorprende y que llega…para quedarse.»Mi camino entre rosas y espinas» de Susana Travel Valladares, nos regala los sentires más inocentes y bellos de una Susana Temprana y soñadora, especial regalo que nos traslada a momentos personales, tesoros de adolescencia y anhelos soñados. «Hilos de tinta» de Cristina Granja es una visión poética desde la madurez, desde la experiencia vivida y desde el lenguaje del corazón, sin duda poesía para compartir. «Cuentos de Ultrapervert» de una especial autora e ilustradora, Lara Herrera, fetiche por excelencia de los más exquisitos paladares visuales, apta solo para mentes sensuales y largas y cálidas noches de verano, un imprescindible en cualquier biblioteca. No podemos cerrar sin recomendar dos libros de escritores clásicos de nuestra tierra «La isla sin aurora» novela de Azorín (José Augusto Trinidad Martínez Ruiz, Monóvar (Alicante), 8 de junio de 1873- Madrid, 2 de marzo de 1967), y » Generaciones 3, fábula«,( 2013) de Cristobal Zaragoza (Villajoyosa , Alicante 4 de marzo de 1923 -25 de febrero de 1999 Orba), última obra de nuestro reconocido premio planeta 1981 con «Y Dios en la última playa«, clásicos consagrados y por consagrar que conviven o convivieron en estas mismas tierras, recorren o recorrieron las mismas calles que recorremos , autores que debemos conocer y Amar …la mejor fórmula para desconectar este mes en el que puede pasar todo aquello que desees…o leas.