La sala sinfónica del Auditori Teulada Moraira se llenó de jóvenes actores la semana procedentes de varios países del mundo, quienes protagonizaron el espectáculo teatral europeo “La gran final”, en el que a través de las artes escénicas se pudo ver cómo es posible superar las diferencias entre culturas y construir un futuro mejor.

Un proyecto de Escena Erasmus de la Universitat de València y el Institut Valencià de la Joventut (IVAJ) que recibe el nombre #Amblesrefugiadades incluido en el programa M´Importa de l´IVAJ.

Desde el primer momento en que se le propuso a la Fundación Comunitat Valenciana Auditori Teulada Moraira este proyecto se consideró que era muy relevante para fomentar todos esos valores y premisas en la juventud, ya que es la línea de trabajo que sigue este espacio en cuanto a pedagogía y educación.

“La gran final”. Auditorio Teulada Moraira. Foto: Auditorio Teulada Moraira

“La gran final”. Auditorio Teulada Moraira. Foto: Auditorio Teulada Moraira

Por la mañana tuvo lugar una sesión dirigida a los jóvenes estudiantes de secundaria que participaron activamente. Tras la representación hubo un coloquio entre actores y estudiantes que se interesaron por el trabajo que hay detrás de la obra, de cómo han aprendido el idioma los actores extranjeros y cómo ha cambiado su vida tras este proyecto de integración social.  Por la tarde disfrutó de la obra el público en general.

Se abre el telón y nos encontramos en un futuro relativamente cercano, el año 2038, donde el elenco de artistas compuesto por 16 personas, estudiantes locales de municipios de Alicante y Valencia, europeos, de Polonia, Alemania, Italia, Eslovaquia, Francia o Suiza, y por primera vez, 4 refugiados de Camerún, Siria, Colombia y Gambia, en clave de comedia hacen que el espectador imagine un futuro mejor , esperanzador e integrador.

Ambientado en un gran estadio de fútbol los actores a través de la música, la coreografía y el diálogo imaginan la Unión Europea que habríamos sido capaces de crear. Un espectáculo donde se pudo ver que el teatro no solo es una herramienta de creación artística, sino también se convierte en una oportunidad lingüística para que muchos de ellos aprendan castellano y valenciano y ver cómo es posible trabajar juntos y superar diferencias.

Los actores brillaron en su puesta en escena a nivel interpretativo y coordinación, por lo que desde la Fundación felicitan a todos ellos, así como a la directores de escena por esta gran iniciativa donde se trabaja la educación en valores, como la solidaridad, la empatía, la paz, convivencia y la problemática de los refugiados y el ocio educativo.

Y como reafirmó uno de los actores procedentes de Colombia “desde el momento cero se rompe con el estigma del refugiado. Es un grupo de personas de diferentes países que se encuentran para hacer teatro y hablar de sus experiencias. Algo muy enriquecedor”.

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