El Festival Internacional de Fotografía (Photoalicante) celebra su décima edición en el MUA con las exposiciones Senescence y The Darkness of light, de los fotógrafos J. Tomás López y Jeff Larson.  Ambas muestras se inauguran el próximo martes 14 de marzo, a las 19 horas, en la sala Polivalente del MUA. Como acto previo a la inauguración, J. Tomás López impartirá una conferencia a las 18 horas.
J. Tomás López es catedrático y ex director del Departamento de Arte e Historia de Arte en la Universidad de Miami. Ha participado en más de cuatrocientas exposiciones colectivas y cuarenta exposiciones individuales. En esta ocasión, López presenta en el MUA la exposición Senescence [Senescencia], un término que describe cómo las células y tejidos naturales se deterioran. El fotógrafo busca ese proceso en las flores marchitas, en toda su belleza, para centrarse en la composición, la estructura y la textura de la paleta de colores. Las imágenes funcionan como memento mori que nos recuerda la propia mortalidad. La inspiración para ese proyecto, tal y como comenta su autor, viene de dos fotógrafos: Por un lado, los cianotipos de Anna Atkins, que creó una forma aplanada pero muy precisa de la flor o planta, un proceso fotográfico que capturaba sin interpretación una planta moribunda. Y, por otro lado, el trabajo colorido y tridimensional del fotógrafo Irving Penn, recogido en el libro “Flores” de 1980.
Por su parte, Jeff Larson es fotógrafo, artista y docente. Vive y trabaja en el sur de Florida y, actualmente, enseña como profesor titular en la Universidad de Miami. Su trabajo explora la idea de objetos cotidianos como fuentes de arte. En The Darkness of Light, habla de la luz como símbolo de vida y florecimiento, de la oscuridad asociada al caos y la muerte, y de cómo ambas pueden existir en armonía. Dos conceptos que Larson utiliza en sus fotografías y que sirven como reacción a las políticas de aislamiento de los últimos años por la pandemia del coronavirus. Al observar situaciones de iluminación de alto contraste dentro de sus propios espacios personales, captura momentos de luz dentro de esas áreas para liberar su mente de los confines de la cuarentena y la abrumadora sensación de temor a estar aislado de los demás. Jugando con la composición en sus imágenes, consigue traer algo parecido a la normalidad de su ser.