Verónica Gómez a los 18 años llegó a Alicante, entró en la tienda de discos Blue Velvet, Gerardo le recomendó un álbum de Billie Holliday y aquella tarde todo cambió, quedó prendada del jazz hasta el día de hoy. Profundizó en esta música de forma autodidacta, escuchando muchos discos, porque siempre ha sido una melómana empedernida. Luego vino la puesta en escena con The Fingertips, Smart Set Trio y bastantes artistas de jazz consolidados tanto nacionales como internacionales. Escuchar conscientemente y actuar junto a músicos que admira y aprender de ellos es su escuela. En cuanto al futuro, desea estar estudiando así durante muchos años más.

Ella estudió traducción e interpretación en la UA, y claro, esto le motivó y ayudó en todo el trabajo de traducción de las canciones que conforman el álbum “Un mar en medio”, donde suenan en castellano estándares de jazz americano y bossa nova.

Nació en Elche, creció en Catral, estudió y experimentó en Alicante y varias ciudades de Francia. Esto le permitió descubrr diferentes formas de vivir viajando por el mundo y a día de hoy reside en El Campello, donde continúa aprendiendo.

Pregunta: Te quiero preguntar, en primer lugar, por la dualidad: Vera Lu y Vera Green. Yo, aunque no sea importante, te conocí siendo la Green, con discos como Le Paradis o Blablabá. Y ya me encantaste y me sorprendiste cuando te escuché cantar en francés algunas piezas, un idioma que es menos musical-mercado y que por razones familiares, tanto me importa. De aquella etapa interesante qué nos queda.

Respuesta: Lu significa Green en chino por lo que sigue siendo lo mismo y yo la misma. Decidí utilizar estos dos nombres artísticos al tratarse de dos géneros musicales tan distintos como son el jazz y el pop, entiendo que el público tenga sus preferencias musicales y quiera saber de antemano qué va a ir a escuchar a un concierto.

Ahora mismo estoy más inmersa en el jazz como se puede comprobar a nivel de exposición pública pero en casa sigo componiendo con la guitarra o el piano para Vera Green y abrazando nuevas ideas y sonidos junto a Manolo Medina. Se podría decir que ya tenemos un buen puñado de nuevas canciones para el tercer disco, son una delicatesen y esperamos sacarlas muy pronto de gira.

P: Te sientes más voz o música/o. Es indistinto pero tienen fuerzas sonoras diferentes. Dónde te ubicas más o mejor, creando o cantando letras o interpretando o creando partituras.

R: En mi caso esto sería como preguntar a una madre a cuál de sus hijas quiere más, a ambas por igual. Es un enorme placer componer mi propia música como interpretar joyas de otros, siempre que estas canciones me cautiven, por supuesto, soy incapaz de cantar algo que no me mueva por dentro.

P: De los últimos meses destaco tus conciertos a dúo, tríos o quintetos con músicos normalmente del entorno (Smart Set Trío, Enrique Pedrón “el Palmera”, Andrés Lizón, Claudio H, Le Jazz Hot, Vera Lu Quartet, Vera Lu Swing Quintet, Daniel Mediero…) Qué valor te ha producido esta experiencia compartiendo escenarios con compañeros de profesión. Haznos una breve descripción de las experiencias que consideras más interesantes para ti.

R: Actuar con diferentes artistas y formaciones me enriquece tanto profesionalmente como personalmente, es un aprendizaje constante.  Además de tener que preparar distintos repertorios para cada ocasión, también desarrollas una gran capacidad de adaptación, que me parece esencial. Un mismo tema puede sonar casi al desnudo a dúo o con mucha más fuerza en sexteto, es maravilloso.

P: En tus últimas propuestas en directo has preparado conciertos donde has compartido géneros en esas audiciones: jazz, swing, bossa nova… Aunque sea difícil con cuál te quedas y los motivos.

R: Disfruto esos tres géneros por igual. Soy muy camaleónica y me siento cómoda cuando estoy haciendo algo que me gusta, tan solo me dejo llevar y todo sucede casi de manera natural. Si por ejemplo estamos haciendo swing en un festival, tus pies no pueden parar de moverse, es incontrolable, y las comisuras de los labios por arte de magia se elevan, y si otro día suena una balada tu corazón se estremece. Cada sensación es única y necesaria y por ello no puedo limitarme a elegir solo una.

P: Alicante y la región de Murcia suelen ser los territorios donde más trabajas. Encuentras / distingues la reacción de los públicos contigo, en función de dónde te encuentras tocando.

R: Algo que me resulta emocionante es la imprevisibilidad de cada concierto, no sabes ni qué sucederá ni quien asistirá. Así que diría que todo es un intercambio de energía entre público y artista independientemente de la ciudad.

P: En la provincia has estado en Alicante, Alcoy, Benidoleig, Catral, Elche, El Campello, Ibi, Guardamar…qué sitios te faltan dónde te gustaría actuar aquí…

R: Así de primeras me gustaría actuar en alguno de los pueblos de la Ruta 99. Sería una buena idea crear un circuito de conciertos para impulsar el turismo interior de estos pueblos con menos de 100 habitantes, además de un lugar de encuentro cultural.

P: Te importa conseguir que la gente entienda las cosas, las emociones. Probablemente por tu profesión hiciste un disco, “Un mar en medio”, allá por el 2018, creo, donde adaptaste al castellano distintas historias musicales compuestas en otros idiomas: inglés sobre todo y también portugués, en una nueva versión y con una nueva dimensión.

R: Me resultó interesante emprender ese proyecto, adaptar esas canciones a otra lengua, indagar en ellas, descubrir anécdotas de sus autores y compartir luego todo esto.  Me gustan los idiomas en general, la traducción, la adaptación y la rima y por esta razón fue como un juego y por supuesto todo un reto.

P: De este disco la obra que lo ilustra pertenece a la artista Perceval Graells. Este planteamiento es una excusa para preguntarte sobre el valor que le das al arte, no solo musical, en tu vida.

R: El arte está presente en mi día a día, y creo que debería estar en el de cada persona, por todos los beneficios que aporta. Fortalece la creatividad y la imaginación, tan necesaria en nuestra sociedad cada vez más sistematizada, y es fuente de inspiración para crear tu propia vida. Descubrir la obra de Perceval Graells, una artista alicantina a la que admiro, y que además esté presente en mi último trabajo es un auténtico privilegio. Cada disco es una obra de arte y en todos ellos he trabajado con un artista local, hay muchísimo talento en Alicante.

P: En esta línea te atreverías a recomendar un poema o un-a poeta a nuestros lectores, por esencial para ti.

R: Jacques Prévert me viene ahora a la mente y su poema “Pour toi, mon amour”, del que hice también una adaptación al castellano y musicalizamos junto a mis queridas compañeras de Mengalir. Y como bonus, del mismo autor recomiendo también “Les feuilles mortes” que justo ayer la estuve cantando y ”Alicante”.

P: Cuando te enfrentas a un concierto cómo es para ti el momento previo al mismo, probablemente emocionante: Incertidumbre, más energía, certezas,… Cada concierto, ¿es una aventura?

R: Siento un profundo respeto hacia cada una de las personas que han decidido invertir su tiempo yendo a verme actuar ese día, no hay que olvidar que sin público no hay evento. En ese momento previo al concierto siempre están los nervios que suelen desaparecer a los 30 segundos de estar cantando, la respiración en el canto es muy terapéutica. Cada concierto es una aventura, sí, y el poder que tiene la música nunca deja de sorprenderme. En un directo lo voy descubriendo sobre la marcha, mediante la observación y la honestidad, y dependiendo de lo que esté ocurriendo en ese momento hago los cambios oportunos, nada es estático.

P: Utilizo una frase arriesgada de las tuyas para que me la expliques: “El silencio es parte indispensable de la música”.

R: Para comenzar porque el silencio es música, es un recurso que si se emplea bien puede generar un gran efecto en el oyente, refresca la percepción y hace que se abandone el automatismo. Lo mismo ocurre en una conversación entre dos personas, no se trata de hablar por hablar sino que se debe dejar también un hueco para la reflexión y el intercambio de ideas, al fin y al cabo la música es comunicación.

P: Qué valoración tienes sobre cómo está la música, el sector en sí, en la provincia de Alicante. Qué habría que mejorar o cambiar. Y de quién depende el cambio: el público, los y las músicos, los promotores.

R: La figura del artista de cualquier disciplina debería estar mucho más presente y más valorada en general. Personas con un enorme talento para llegar a fin de mes deben invertir su tiempo en otros trabajos que impiden que se desarrollen plenamente en el campo artístico, y considero que esto es una gran pérdida para la sociedad. Se debería tomar conciencia de la importancia que tiene la música, y por parte de las instituciones públicas dar más facilidades en la gestión y promover más proyectos para fomentarla.

Próximos conciertos:

26 marzo Museo de la Biodiversidad, Ibi.

29 mayo Jazzorama Festival, Ibi.