La pasada medianoche tenía lugar en la bahía de Altea la treinta y tres edición del Castell de l’Olla. El evento pirotécnico fue seguido por más de 50.000 personas que se dieron cita en la playa de l’Olla y alrededores para disfrutar de este espectáculo único en el Mediterráneo. El castillo se dispara desde la mar mediante unas plataformas que se instalan, a tal efecto, a 300 metros de la línea de la costa.
Con una duración aproximada de unos veinticinco minutos, a las doce de la noche comenzaba el espectáculo a cargo de la pirotecnia Ricardo Caballer (Ricasa) que disparó alrededor de 2.300 kilos de pólvora.
Esta edición del Castell de l’Olla ha sido la más sostenible de la historia a tenor del esfuerzo llevado a cabo este año por la pirotécnica de Ricardo Caballer, la Cofradía del Castell de l’Olla, y el apoyo del Ayuntamiento de Altea y la multinacional INDRA. La empresa pirotécnica no disparó elementos con plásticos, para evitar generar residuos, y utilizó carcasas de cartón. Del mismo modo los elementos de pólvora empleados por Ricardo Caballer no tenían plomo ni elementos químicos como el perclorato o dicromato.
Igualmente, la Cofradía diseñó unas plataformas de corcho biodegradables para albergar los famosos ‘pavos reales’ (cohetes que estallan a ras del mar generando un semicírculo de gran tamaño). Además del uso de sacos con arena para los muertos y cuerdas de esparto.
El evento contó con la presencia de una nutrida representación institucional. El alcalde de Altea, Jaume Llinares, y el presidente de la Cofradía del Castell de l’Olla, José Pérez, recibieron a las puertas de Villa Gadea al conseller de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, Arcadi España; y a la consellera de Innovación, Universidades, Ciencia y Sociedad Digital, Carolina Pascual. También asistieron al acto los secretarios autonómicos de Educación e Investigación y de Política Territorial, Urbanismo y Paisaje; Miquel Soler e Imma Orozco, respectivamente. El director general de Turismo de la Comunitat Valenciana, Herick Campos; el director del Patronato Provincial de Turismo Costa Blanca, José Francisco Mancebo; el director gerente de FGV, Juan Andrés Sánchez; los concejales de Turismo, Xelo González; Seguridad Ciudadana, Miguel De la Hoz; Fiestas, Marta Lloret; Comunicación, Pere Barber; y una amplia representación de la corporación municipal alteana y otras autoridades.
Antes de lanzarse el Castell, tuvo lugar la entrega de premios ‘Illeta d’Or’. Este año la Cofradía ha reconocido con este galardón a la Fundación Caixaltea, Rover Alcisa, Grupo Imed y al periodista José Manuel Gironés, ‘por su apoyo a esta cita’.
Llegado el turno de parlamentos, el alcalde de Altea agradeció a todos los presentes su asistencia y les dio la bienvenida a nuestra localidad. Jaume Llinares hacía referencia al ‘’importante número de medios, recursos humanos y efectivos de seguridad que velan para que año tras año sea un éxito’’. El alcalde subrayaba que ‘’el trabajo conjunto del Ayuntamiento de Altea con la colaboración de la Cofradía del Castell y otras administraciones y voluntarios es fundamental para su buen fin’’.
Jaume Llinares manifestaba que ‘’el Castell de l’Olla forma parte de nuestra cultura, manera de ser y sentir la fiesta. Además, es un acto que se integra en el proyecto cultural alteano, en la Capitalidad Cultural de Altea y su ‘Mar d’Espectacles’ ‘’.
El Castell llenó la bahía de Altea con grandes palmeras y los reconocidos ‘pavos reales’ que emergían del mar, formando una amalgama perfecta de luz, sonido y color. El público ovacionó el espectáculo que finalizó con una apoteosis de sonido y color que emocionó a todos los presentes.
Más información del Castell de l’Olla
El Castell de l’Olla es un evento organizado por la Cofradía del Castell de l’Olla y cuenta con el patrocinio del Ayuntamiento de Altea, Diputación de Alicante, Generalitat Valenciana, Rover Alcisa, Fundación Caixaltea, Hospital IMED Levante, INDRA, Hotel SH Villa Gadea y Hotel Cap Negret.
El evento está reconocido como ‘Mérito Turístico en la categoría de Oro’ de la edición de 1999 por la Diputación de Alicante y en 2007 fue declarada ‘Fiesta de Interés Turístico de la Comunidad Valenciana’ de la Generalitat; así como Importante del diario Información de Alicante. Igualmente fue calificado por CVC como ‘Bien Etnográfico de Interés Cultural’.
Comentarios