El Ayuntamiento de Alcoy ha iniciado los trámites para preparar una exposición con la que rendir homenaje al pintor alcoyano Antonio Gisbert y que llegará de la mano del Museo del Prado, del que fue su director de 1868 a 1873.

El alcalde, Toni Francés, junto al concejal de Cultura, Raül Llopis, y el pintor Ignacio Trelis mantuvieron el jueves una reunión con el director del Museo del Prado, Miguel Falomir, y el jefe de conservación de pintura del siglo XIX, Javier Barón, en la que se dieron los primeros pasos para que obras de Antonio Gisbert propiedad del Museo del Prado puedan estar en Alcoy para formar parte de la exposición conmemorativa, que se completará con cuadros procedentes de colecciones particulares.

A falta de concretar las fechas, se considera oportuno celebrar la exposición en diciembre, teniendo en cuenta que fue en dicho mes cuando se produjeron los hechos que plasmó Gisbert en ‘Fusilamiento de Torrijos y sus compañeros en las playas de Málaga’, considerada como una gran obra maestra del siglo XIX. Junto a la muestra, se organizarán una serie de actos culturales en torno a la figura de Antonio Gisbert y sus obras.

El alcalde agradece el apoyo mostrado por los responsables del Museo del Prado, pues desde un primer momento han considerado viable la cesión de diferentes obras de Gisbert para que puedan verse en Alcoy. Toni Francés remarca que “se trata de una importante ocasión para acercar la figura y la obra de Antonio Gisbert a todos los alcoyanos y a quienes vengan a esta ciudad a disfrutar de uno de los pintores españoles más galardonados de su época. Fue un pintor reconocido internacionalmente y queremos rendirle homenaje en Alcoy con una exposición de alto nivel”.

Señalar que hasta final de junio puede verse en el Museo del Prado la exposición ‘Una pintura para una nación’, dedicada a Antonio Gisbert, que se enmarca en el bicentenario del museo y el 150 aniversario de la nacionalización de las colecciones reales. En el centro de la muestra se encuentra la histórica obra de Antonio Gisbert ‘Fusilamiento de Torrijos y sus compañeros en las playas de Málaga’ (1888), que el director del Prado ha calificado como “el Guernica del siglo XIX”. Se trata de la única pintura de historia encargada por el Estado con destino al Prado, que reivindica a Antonio Gisbert con una obra concebida como símbolo de la defensa de la libertad y de la lucha contra el autoritarismo. En la exposición también puede verse un boceto y una réplica reducida de esta extraordinaria obra, así como otras tan destacadas como ‘Ejecución de los Comuneros de Castilla’, que habitualmente se encuentra en el Congreso de los Diputados, y la última carta de José María Torrijos a su esposa, entre otras obras.

Los responsables del Museo del Prado recibieron los libros ‘Historia de Alcoy’, editada con motivo del 750 aniversario de la fundación de esta ciudad, y ‘Embajadas, arte e historia’, de Juan Javier Gisbert, así como un cuadro de Ignacio Trelis que representa al rey Melchor.