No somos conscientes de la gravedad del “apocalipsis de los insectos”, como así lo llaman ya los científicos, pero las consecuencias de su desaparición pueden afectar al planeta por entero, pues la vida en la tierra no podría desarrollarse y la especie humana desaparecería en un breve lapso de tiempo.

Los insectos suman más del 70 por ciento de las especies conocidas e intervienen en todo el proceso de los ecosistemas. Siendo el grupo de seres vivos más diverso de la Tierra, con más de un millón de especies descritas es, sin embargo, uno de los grupos más amenazados actualmente. De ahí que científicos y medios de comunicación han empezado a hablar de “apocalipsis de los insectos”. Un reciente artículo científico publicado en febrero en la revista científica Biological Conservation ha hecho saltar las alarmas sobre el declive de este grupo de seres vivos, primero en la cadena trófica.

La alerta sobre el grave peligro que supone su desaparición está justificada si se tiene en cuenta que los insectos son los principales descomponedores de la naturaleza llevando a cabo el reciclado de restos de origen animal y vegetal, los responsables del control biológico de plagas, siendo de gran ayuda a los agricultores; como también, los mantenedores de la diversidad vegetal, dado su papel imprescindible como polinizadores de las plantas.

A pesar de su extraordinaria diversidad de formas y colores, de su presencia en todos los rincones de la tierra y que son imprescindibles para el buen funcionamiento de los ecosistemas, siguen siendo muy desconocidos para amplios sectores de la sociedad.

Para concienciar del peligro que puede suponer su desaparición el Museo de la Biodiversidad ha organizado la exposición ““Los Insectos mueven el mundo” que se inaugura el miércoles 22 de mayo a las 12:00 horas. Intervendrán Juan Mora Pastor, director del Secretariado de Investigación del Vicerrectorado de Investigación y Transferencia de Conocimiento de la Universidad de Alicante; el director del Centro iberoamericano de la Biodiversidad (CIBIO) de la UA, José Luis Casas Martínez; el catedrático Josep Bernábeu Mestre, director académico de la Cátedra Carmencita de Estudios del Sabor Gastronómico y del Centro de Gastronomía del Mediterráneo UA-Dénia (Gasterra); les acompañarán el alcalde de Ibi, Rafael Serralta, y el teniente de alcalde de Turismo y Museos, Ramón Barea.

La muestra, en la que se puede ver desde distintos tipos de nidos de avispa, o ejemplares de la avispa invasora que come abejas, la llamada avispa asiática o Vespa velutina, está organizada por el Museo de la Biodiversidad, el Instituto CIBIO (Centro Iberoamericano de la Biodiversidad), la Universidad de Alicante y el Ayuntamiento de Ibi y cuenta con el patrocinio de la Generalitat Valenciana y la colaboración de la Asociación española de Entomología (AeE) y la Cátedra Unesco “Reservas de la Biosfera y Ambiente Urbano”.

El Museo de la Biodiversidad está ubicado en la Glorieta de Nicolás Paya, de Ibi (Alicante).