Alejandro Palomas vino a Alicante a cenar y hablar de él pero, sobre todo, de sus 17 libros que tiene en las librerías del barrio. Marina Vicente, editora y directora de la Agencia Mankell, le ha invitado al ciclo de encuentros literarios El Sabor de las Palabras. Palomas nació en Barcelona en el 67. Se licenció en Filología Inglesa y tiene un Máster en Poesía por el New College de San Francisco. Ha publicado poemarios como “Entre el ruido y la vida” o “Aunque no haya nadie” o novelas de claro corte poético como “Agua cerrada”. Premio Nadal 2018 por su última novela, “Un amor”. Escribe mucho a partir de lo que tiene al lado. Si quiere escribir de una familia escoge la estructura familiar que ya tiene. Como él dice, la dinámica de las mentiras, de los secretos, de las medias verdades, de lo que no duele, de lo que mejor que no duela, esto a él le da la vida. Quiere a sus personajes como compañeros de viaje, no como compañeros de una relación. Vive en mitad del campo, en una casa, con su perro. Tenía una tía bibliotecaria y esto algo habrá ayudado a todo. Dice de la familia que le interesa en tanto que es un territorio de relaciones no elegidas al que se debe de sobrevivir. Hay mucho psicoanálisis en su vida y no puede evitar que se refleje.
Pregunta: Una madre, Un perro y Un amor. La supuesta trilogía acabada, pero entonces llega Oksana y dices que te enamoras del personaje- ¿Eso puede gestar el to be continued?
Respuesta: Yo mentiría si te dijera que es una historia cerrada porque yo no la siento así. Cuando haya cuatro se llamará tetralogía. Me pongo trampas para no dejar las cosas, como es el caso de Oksana. Ahora tengo un motivo para seguir desarrollando y no despedirme. No me gustan los adioses si no hay motivos de fuerza, en mi caso, tengo todos los motivos para quedarme con ellos.
P: Por cierto, distinguías en tu última novela entre “un amor” y “el amor”, como queriendo hacer distinto las palabras, por sus matices.
R: Un amor enamoramiento eso, en principio, no es el amor. En mi caso particular, tiendo a relacionar o encasillar el amor donde no hay tensión sexual. En el enamoramiento el sexo nubla la cordura. Me gusta querer sin tensión.
P: Cuentan que te mueves en el terreno de la literatura más emocional. Por tanto, como la vida misma, en la que a las personas nos atrapan los sentimientos, tan necesarios. ¿Te gusta situarte en este tono? Por ejemplo, en Un Amor.
R: Parece que estamos en el desprecio de lo emocional o de lo sentimental, en este último caso, es cuando el desprecio es máximo. Si no sentimos nada es que somos muebles. Hay autores y autoras que le da miedo tratar la emoción. Para tratar las emociones en ficción tienes que ser consciente de tu talla como autor, dado que es muy difícil describir el material que compone el corazón.
P: ¿Cómo sobrevives a aquella etapa creativa que tuviste de literatura juvenil?
R: Nunca escribí para ese sector, pero es verdad que una novela encontró su camino que derivo en ese tipo de lector aunque era un libro de adultos. El mercado encontró esa vía.
P: ¿Cómo se puede ser Master en Poesía por el New Collage de San Fancisco? No debe ser por una cuestión profesional especialmente…
R: Quería irme de casa, pero con una razón que fuera creíble, que fuera una cuestión propia de Alejandro a efectos de mi familia. Por cierto, el Máster no lo he podido convalidar.
P: ¿Cuál es el manantial de tu creación, la concreta, la del hecho específico que desarrolla el eje?
R: Es mi propia familia, pero con mi filtro que la hace más peculiar. El manantial es mi forma de mirar, el filtro de cada uno, dado que todos somos muy originales. Yo en cambio no tengo filtro lo que tengo es sobre todo desfachatez
P: Me encanta cuando expresas, con sinceridad, esa envidia por ser madre o mujer. Dándole un valor esencial a esa condición. ¿Vives es un mundo donde te sientes mujer, vestido de hombre o es otra cosa?
R: No me siento mujer porque no sé cómo es. Esa es la curiosidad, cómo es la condición de mujer. Le preguntaba a una amiga cómo te sientes con un cuerpo de mujer. No soy capaz de entender un cuerpo que tiene una textura diferente. Soy capaz de meterme en el alma y la emoción, pero no en el cuerpo que además no sé cómo lo utilizaría. Yo veo jugadoras de tenis en una final del Roland Garros, donde ellas están pendientes de cómo las miran… gestos que son para los demás, y donde tienen que invertir un diez por ciento más por la supuesta la imagen pública y es una tensión, aunque lo vivan de forma más natural a como lo viviría yo en mi calidad de hombre.
P: ¿Qué le propondrías a un Ministro o Ministra de Cultura que pueda durar más de 6 días en su cargo?
Lo que mejor que le puede pasar un ministro, cuando acabe, es que no sepan ni su nombre. Porque hay que gestionar, las buenas obras, sin importar exactamente quién es la persona que lo ha co-promovido. Y también sería importante que ese cargo concreto lo eligieran de los primeros de la lista, no como ahora que van al cierre una vez se han seleccionado las carteras teóricamente más importantes.
INSTANTÁNEAS:
Tu canción favorita.
Tu ciudad del amor.
No me gustan las ciudades.
El último poemario que has leído
En Barcelona), a dónde llevarías a alguien especial:
A mi casa.
Ves películas por internet o por TV
No veo.
Facebook o twitter
Las dos redes por igual.
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