Gordillo, en un coleccionista que lo ordena o acumula todo por cajas. Guarda tanto objetos banales de la cultura popular como imágenes de la prensa haciendo una amplia radiografía de la realidad. También chistes e imágenes médicas por la profesión de su padre. De todo ello se decantan imágenes de carácter psicodélico a veces cercanas al pop. Es a partir de los años 80 cuando alcanza su madurez creativa con un estilo artístico inconfundible que lo ha mantenido alejado de grupos y tendencias en una especie de automarginación, consolidando su imagen personal.

Los domingos a las 12 en el MACA es una fiesta de introducción a las artes en la que el equipo de guías organiza visitas divulgativas de la obra de, por ejemplo, las exposiciones temporales. Es una fórmula muy interesante que nos permite acercarnos en una hora a las propuestas expuestas.

La exposición FOTOALIMENTACIÓN, comisariada por el propio Luis Gordillo y Rosa María Castells del MACA, es retroalimentación y presenta al Gordillo más cercano a la fotografía creando nuevos espacios en los que la pintura y la fotografía dialogan e interactúan entre sí; articulando nuevas maneras para la expansión de la fotografía en la obra.

Luis Gordillo es un artista, en sus palabras, que no para de jugar y experimentar con su arte: la construcción, reconstrucción y destrucción de la imagen. También con los materiales, los objetos, seriando, repitiendo, desdoblando casi obsesivamente, según se pueda apreciar en la muestra instalada. Trabajando con el negativo y el positivo de la imagen, superpuestos o a veces ligeramente desplazados, y también descompuestos en los cuatro colores de la cuatricromía. Donde los dípticos se llaman dúplex.

FOTOALIMENTACIÓN muestra dos etapas con claras diferencias: una primera con el trabajo fotográfico de los 70, casi en su totalidad en blanco y negro y otra posterior donde ya aparece el color y la utilización de la nueva tecnología digital que le abre a Gordillo un campo casi infinito a la experimentación.

Es muy recomendable conocer a Luis Gordillo, ahora que otoñea en Alicante, un autor que le interesa más la construcción de la obra, los procesos, que la propia obra final en si.