Conxa Guilabert, directora del IES Macià Albela de Crevillent, es una mujer volcada en estudiar y difundir la cultura de su pueblo. Ha sido autora y coautora de numerosos artículos de investigación y didáctica sobre música, gastronomía, juegos y fiestas tradicionales. Fue la inspiradora del Museo del Esparto que reproduce la casa-cueva de los últimos esparteros crevillentinos. Ha publicado una novela, Pell d´Angel; ha estrenado un sainete, Mare, vull ser marinera; y recientemente ha redactado el prólogo del libro de Dora Català Dels colors interiors i altres escrits. Además tiene en proyecto la publicación de un estudio sobre el bandolero Jaime el barbudo y de su obra inédita Quatre amors i mig.
A todo esto y más que figura en su currículo, hay que añadir que Conxa es una mujer generosa, siempre dispuesta a aportar y colaborar. Ocupadísima, como todas las personas eficaces, pero disponible. Las numerosas actividades que promueve desde su trabajo y el apoyo a la ONG educativa Aserra completan su perfil. Tuve el placer de compartir con ella una doble conferencia sobre el esparto en la literatura española y catalana y de colaborar en su revista anual de la fiesta de Moros y Cristianos, de la que ella ha sido Mantenedora, y que como otras tradiciones y personajes de su tierra, forma parte de su amplio campo de intereses.
Estimada Consuelo,
gracias por invitarme a participar en esta sección tan sugerente que diriges Mujeres que nos escriben.
Confieso que sí me gusta escribir, pero reconozco que la escritura no es el único de mis intereses y esto hace que no le dedique el tiempo que esta apasionante afición necesita. Soy una enamorada de la literatura, de mi lengua, de las costumbres y tradiciones, de la montaña, de la vida, de los amigos y la familia, de la relajación, de la Fiesta de los Moros y Cristianos, docente por vocación, me gusta comunicar, tejer el esparto, conversar, innovar… Me gustan tantas cosas, que agradezco que de vez en cuando alguien me empuje a escribir.
Si retrocedo en el tiempo me recuerdo de niña inmersa en las páginas de un libro mientras la madre me gritaba a la hora de comida una y otra vez hasta que cansada de mi ausencia me tenía que ir a buscar, o por la noche escribiendo en las páginas de un diario mientras mi hermana me repetía insistente que apagara la luz para dormir.
Hija de maestro, Reyes Magos acostumbraban a llevarme más libros que juguetes. Y el despacho de mi padre era el escondrijo perfecto para registrar ejemplares desconocidos que leía en voz alta.
Con el paso de los años el aprecio que sentía por la lectura condicionó la elección de mis estudios universitarios. Entonces todavía no sabía que sería profesora, pero sí que tenía que estudiar literatura. A lo largo de los diez años que viví en la capital alicantina tuve la suerte de participar a las tertulias de los Dimarts poètics de la Naia y posteriormente a las de Rebolica y estar en contacto con poetas y poetisas reconocidos. De hecho mis primeros escritos fueron poemas.
Agradezco a la vida que siempre he tenido buenos amigos que me han guiado por el camino de la escritura y me han propuesto aventuras alentadoras. A veces afirmo medio en broma medio serio que escribo por encargo puesto que sin estas personas no sé si habría osado escribir o mejor dicho hacer público aquello que escribo.
José Manuel Martínez Polo, profesor universitario y poeta, tristemente desaparecido antes de tiempo, fue uno de ellos. Era en 1999 cuando me propuso escribir un ensayo semanal en la revista digital Vilaweb-Crevillent. Fruto de esta colaboración son los textos: Amb nom de dona, Bogeries, El mercat, Pels matins… D’amagades José Manuel presentó un de mis escritos, M’agrada estar ací, al concurso literario Vila de Crevillent del año 2000 y para sorpresa mía resulté premiada.
Me introdujo también en el mundo de la radio digital con el programa La biblioteca en el que yo reseñaba las novedades literarias que aparecían en diferentes editoriales.
Toni Rovira, profesor y escritor, es otro buen amigo que me propone y acompaña en muchos proyectos literarios , motivo por el cual le estoy eternamente agradecida. Recuerdo la primera vez que me pidió que le escribiera un cuento para el diario digital de Morvedre. A partir de ahí vinieron otros La vocació, La visita, La mona borratxa, La dona tranquil.la, La cadira de rodes, Abracadabra, L’Aranya… Uno de ellos , L’home invisible, fue publicado posteriormente por el Diario digital lo Mundo, otro , Nostalgia, en el diario Armonía y Ave Maria en el libro Se Crevillent un tesoro publicado por la Tertulia Literario-Artística El Candil.
Me animó también Toni Rovira a participar al Libreto de la Falla La Marina del Puerto de Sagunto y fruto de esta nueva colaboración nacieron los cuentos para adultos: Honorat, El Sacrilegi i 1992,volar una altra vegada. Y los infantiles: La rabosa del desert, El meu amic el drac, La musa Sole, Els xiquets sense veu i L’Olaia, todos ellos bajo la consigna de temáticas muy trascendentales como es el caso de la violencia vicaria, los ODS o la igualdad de género.
De la mano de Toni entré también a formar parte del proyecto De la mano de un escritor un interesantísimo trabajo coral que consiste a continuar relatos comenzados por alumnado de diferentes centros educativos, publicados por el CEFIRE Específico de Plurilingüismo. El bosc màgic L’assassí del huit, El fosc passat de l’Edgar, Olor de Crisantem i El segon adveniment son un buen ejemplo.
Actualmente participo en otro proyecto coral, Los últimos catorce, dirigido por el poeta castellonense Alfons Navarret.
Piel de Àngel, mi primera novela publicada, ha marcado un antes y un después en mi relación con la escritura. El libro narra una historia real y trágica, que describe las dramáticas consecuencias que comporta un accidente de tráfico.
Con Piel de Àngel he recorrido muchos institutos de secundaria acompañada por su protagonista el Ángel y su madre la Rosa. Me resulta difícil de describir la magia y la conexión que se producía a cada encuentro con el alumnado. Y dique se producía, en pasado, porque la reciente muerte del Ángel ha sido tan sobrecogedora que necesite tiempo para asumir la pérdida de aquel a quien tanto estimaba.
Siguiendo con mi trayectoria de encargos accedí a la demanda de otro buen amigo y escribí el sainete Mare, vull ser marinera que ha sido representado por el grupo de teatro «Los teatrers».
En breve tengo prevista la publicación de la novela Jaume, el rei de la serra que narra las aventuras del bandolero crevillentino Jaime el Barbudo mezcladas con una trama ficticia que espero que sea atractiva para el público juvenil y para algún que otro adulto enamorado de esta mítica figura.
Al cajón de los papeles no publicados duerme mi primera novela escrita Cuatro amores y medio, una historia de afectos entre la literatura, el cine, la fotografía y la música, presidida por el sortilegio del destino.
Otros escritos, de los cuales soy coautora son Rondalles crevillentines, Jocs populars i tradicionals de Crevillent,i Gastronomia tradicional de Crevillent, pastes, dolços, refrescos, gelats i licors.. En el mismo sentido y dentro del campo de la investigación y la docencia he impartido charlas organizadas por el Cefire y otras entidades: Costumbres y tradiciones, Cursos de Dirección, Proyectos inerdiciplinars, Creación de materiales TIC, Mujeres de Crevillent, Mujer y esparto o el Esparto a la literatura catalana, esta última acompañada por la amiga Consuelo Jiménez de Cisneros que disertó alrededor del Esparto a la literatura castellana.
Participo activamente en la vida cultural que me rodea siempre y cuando la tarea de dirección de la IES Macià Abela me permite. Dirijo el Proyecto Educativo Cova Museu de l’espart Antonio y Matilde y formo parte del consejo de Crevillent Ciutat Lectora. Colaboro con el Club de Lectura para adultos de la localidad y también en el del centro donde trabajo.
No puedo olvidar mi pertenencia a un grupo muy especial llamado Aulalila Cisneros, un oasis cultural que comparto con unas pocas y pocos amigos y que representa sustento para el espíritu.
He tenido el placer de glosar las publicaciones de Toni Rovira, Mario Sánchez, Glòria Candela, Noelia Gil, Joan Garí, Luís Leante, Enrique Cerdán Tato, Lluís Roda o Dora Català entre otros.
Y llegado a este punto, estimada Consuelo, podría seguir sumando más información a esta epístola con el peligro de caer en el defecto de la pedantería y no es esa mi intención, puesto que sí algún merecimiento me defeneix en el ámbito de lo más íntimo y personal es la modestia y la sencillez.
Escribo estas líneas con el deseo que tal vuelta mis palabras sirvan otras mujeres que alguna vez han sentido la voz de la escritura y no se consideran merecedoras de tirar su mensaje al viento superando el pudor que el acto de ser leída supone.
Un fuerte abrazo
Conxa Guilabert Fajardo
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