Crónicas de moda alicantina

La moda alicantina se mueve, como la cultura se mueve en la ciudad y da la sensación en ciertos momentos de mayor viveza, de movidita. La moda aquí siempre se ha movido pero la calle no siempre le ha seguido la pista. Nos encontramos en una provincia eminentemente rica en creación de productos para la moda. Ya en el siglo XIX parte de la provincia era puntera en cuidar mucho la fabricación de textiles, como bien sabréis quienes hayáis tenido ocasión de ver muestras de antiguos tejidos fabricados en la zona de Alcoi, habréis podido comprobarlo de sobra. Por no hablar de zapatos, desde aquí se ha calzado, como quien dice, a multitudes de medio planeta.

En los últimos años, con determinación, la moda alicantina ha venido afianzando desde dentro su escaparate, viendo que tan importante es crear como comunicarlo. Aunque aún así, no es posible hablar de un gran avance de consumo en la provincia. Hay quien nos recordará que la recesión hace mella o que el producto es exportable y se exporta estupendamente (nos alegra). Pero, si intentamos enumerar rapidamente 5 o 10 marcas alicantinas es posible que algo de desilusión nos llegue. Si preguntamos en qué tiendas de la ciudad podremos adquirir estas firmas cercanas, la desilusión se puede doblar. Muchas de las firmas están en los espacios comerciales más concurridos, pero no se sabe. En cuanto a ropa somos, lamentablemente, una de las capitales de provincia que no posee una tienda multimarca propiamente dedicada a diseño local (emergente o no).

 Fotos: Elena González para Estudio Cero fotografía, en Alicante Fashion Week

Fotos: Elena González para Estudio Cero fotografía, en Alicante Fashion Week

Aunque merecen mención los profesionales que durante décadas han estado a pie de obra y batiéndose por mantener tienda propia, en las recientes temporadas han surgido un número considerable de firmas nuevas, amparadas claramente en la cobertura que permite el comercio electrónico y el fenómeno redes. Hemos visto también cómo ha crecido una plataforma como la semana de la moda de Alicante, Alicante Fashion Week, una cita que edición a edición se va consolidando como muestra oficial, algo que hubiese parecido impensable hace sólo un lustro. Destacable también que la ciudad de Benidorm, que fue pionera en España en autorizar en 1952 el uso del bikini, acabe de presentar su iniciativa centrada en un premio nacional al diseño en moda baño, Mediterranean Fashion Beach, logrando que apoye el certámen una marca emblema como Dolores Cortés, que lleva en activo desde mediados de los 50.

Al margen de certámenes e iniciativas institucionales (o privadas, que son unas cuantas: Moda Nova Events, Revista Möndan, TheoModa, Mercado de Diseño de Alicante…) cabe resaltar el salto que el público ha hecho para entender que la comunicación de moda forma parte de la oferta de ocio. Lo que nos interesa aún más, que se va entendiendo en mayor o menor medida, es que asistir a la presentación de una firma o al desfile de una colección, es también un acto cultural similar al que disfrutamos cotidianamente cuando vamos al cine, al teatro o a un concierto, sobreentendiendo que estamos apoyando una industria con clarísimo componente cultural.