Durante el mes de noviembre el espacio cultural Viva La Pepa acogió un conjunto de recitales poéticos dentro de la actividad Dimarts de Poesia i Narrativaque se realizaba todos los martes a las 21 h.

En este mes participaron los poetas Miguel Valero, Pancho Capitán, Iván Calero, Christian Vázquez y Mayte Hueso que fue quien ganó el certamen de noviembre por votación popular del público asistente al evento.

Mayte es una persona bastante responsable en las iniciativas que emprende, aunque tiene un punto de inseguridad como enfrentarse al público que esta ocasión lo superó. Se considera una persona alegre pero también especialmente sensible, por lo que le afectan las cosas y de hecho escribe a veces desde esa posición. A ella le preocupan mucho las personas que le rodean, es muy pasional y temperamental, creciéndose ante las dificultades.

Trabaja en el pequeño comercio en el centro de la ciudad gestionando una tienda de ropa de mujer que apuesta por firmas españolas donde se especializó en un género de más calidad.

Su hijo es la persona más importante de su vida incluso -dice- más que ella misma. Afirma que es lo mejor que ha hecho en su vida. Confía en la gente que de alguna forma es su hogar y con aquellas con las que ha podido salir adelante. “Esto me ha ayudado a distinguir entre sentirme sola y estar sola, sobre todo si es impuesta”.

Cree que el dinero es un problema más allá de que sea el medio para vivir. El dinero nos hace dejar de valorar las cosas importantes. En conclusión, ella es un animal social, no teme a la  gente, todo lo contrario.

Pregunta: Maite, ¿qué supone la poesía para ti?

Respuesta: Esto empezó de forma fortuita quizá para limpiar escombros propios. Muchos de los textos nacen de momentos tristes llorando con palabras y no lágrimas. Todo me sirve: una foto, canción. No suelo planificarme, me surgen en cualquier momento e incluso los primeros borradores los hago desde el móvil donde me encuentre.

P: ¿Cuál es el prisma con el que ves las cosas a través de la poesía? Tienes temas esenciales o funcionas según el momento.

R:  Un tema recurrente es el amor y la tristeza. Sigo creyendo en el amor, el romántico, el fraternal o el de los amigos. Hablo mucho del hogar y de las personas que se cruzan en mi vida. El ser humano tiene la capacidad de hacer feliz a alguien o provocar el dolor. Las emociones humanas me atraen, entre ellas la tristeza que es cuando más nos necesitamos.

P: En estos años, ¿te sientes satisfecha con tu desarrollo poético o hay asuntos por resolver?

R: Leo textos de cuando empecé y me doy cuenta de que ahora me siento muy satisfecha. Ahora consigo expresar adecuadamente lo que siento y pienso. Por otro lado, tengo mucho escrito sobre el Alzheimer una enfermedad que te roba la salud y la memoria, algo que viví por mi madre. En mis primeros textos, entre otros, aborde esa situación.

P: En tu opinión, ¿Cómo ves este género, la poesía, en la ciudad de Alicante?

R: Si descontamos lo ocurrido en estos dos últimos años, hay un circuito pequeño pero importante de locales que apuestan por la cultura y la poesía. Se hace necesario que las instituciones defiendan más la poesía. Hay que hacer más difusión de lo que se está haciendo. Aprecio más la poesía ahora que en mi juventud. 

P: Por tus lecturas, recomendarías a algún poeta que sea para ti de referencia.

R: Quien me hizo amar la poesía fue Joaquín Sabina una figura que se conoce menos como poeta. Su poesía urbana puede llegar a mucha gente. Marwan también me gusta mucho pero también clásicos como Benedetti y Neruda.

P: ¿Qué te pareció ganar, por votación popular, el certamen de noviembre en Viva La Pepa?

R: Fue un subidón, una alegría muy grande. Era el sitio que tenía que ser porque Pepa, su propietaria, siempre ha creído mucho en mí y consiguió que yo creyera en mí y volver a casa y recitar ante los amigos aun siendo textos muy intimistas. Disfruté mucho.